- Lo siento por no haberme despedido al irme, en general lo siento por todo Chris.
- Chris -sonrió.
- ¿Qué pasa? Es tu nombre. - dije.
- Eres la única que me llama así, llevaba dos años sin escucharlo. - dijo sonriendo.
- Anda ven aquí imbécil. - le abracé.
Christian empezó a reírse.
- ¿Qué pasa ahora? - dije.
- No me acordaba ya lo que era abrazar a una enana. -dijo riendo.
- Capullo. - le di un puñetazo en el hombro.
- Y bueno cuéntame, que ha sido de ti, que has hecho, que haces.
- El pasado no voy a hablar de él, ahora he empezado una nueva vida, ya lo habéis podido comprobar todos que ya no me muevo por donde todos, y que a penas me veis, pues me he ido a otro insti, y bueno para que luego no me lo eches en cara, eres el primero en saber esto.
- ¿El único? Valeria, todos saben que te has cambiado de instituto.
- No me refiero a eso, si no que este es mi último semestre aquí.
- ¿Aquí dónde?
- En Palm Beach.
- Venga ahora en serio, Valeria.
- Hablo en serio, me voy a España con mi padre, aún no es seguro, tengo que hablarlo con mi madre, avisar a mi padre, y arreglar cosas para que me acojan en mi antiguo instituto, pero bueno tampoco me vais a echar en falta mucho.
- ¿Eres idiota? No pienso dejar que te vayas, me niego a perderte una vez más.
- Vendré por Navidad, y algún verano, te prometo que hablaremos todos los días.
- Si como cuando te fuiste al internado ¿no?
- Esta vez hablo en serio, necesito cambiar de aires.
- Y ¿no será que no soportas ver como Jake ya no te come el culo?
- No es eso, él ahora es feliz, que es lo único que pido.
- Vamos Valeria, puedes mentirle a cualquiera, menos a mí, y sé que si te vas de aquí, es por él, ¿habéis vuelto a hablar?
- Si, bueno hemos coincidido un par de veces, pero que no me voy por él, echo de menos a mi gente, hace mil que no los veo, y además prometí a mi mejor amiga graduarnos juntas.
- Espero que de aquí, a lo que queda de semestre, cambies de opinión, que no he esperado dos años para que ahora me vuelvas a abandonar. - puso cara de cachorrito.
- De verdad que eres la persona más imbécil que conozco. - reí.
- Sí si, y a la que más quieres.
- Eso ni lo dudes.
- ¿Te apetece que vayamos a tomar algo? Invito yo enana. -dijo Chris.
- Vale, pero si luego me acompañas a casa. - le puso ojitos.
- Te tengo muy mal acostumbrada eh. - dijo.
- Va que sé que echas de menos hacerlo.
Chris subió arriba a por la cartera y una chaqueta, y nos fuimos a la heladería de la avenida.
Pedimos un helado de galleta para cada uno y comenzamos a contarnos cosas de todo este tiempo, no parábamos de reír, era como si nada hubiese cambiado, como si ese distanciamiento no hubiera existido, y la verdad es que me encantaba estar así, lo echaba tantísimo de menos, estaba feliz, pero dicha felicidad desapareció cuando justo en la mesa de enfrente vi como Jake y su querida estudiante de intercambio alemana, Andrea, estaban compartiendo un batido de vainilla gigante, casualmente el mismo que se tomaba conmigo cuando estábamos juntos, pero lo peor fue cuando Jake se dio cuenta de que estábamos allí.
- No os había visto chicos. - dijo Jake. - Andrea ven. - dijo.
- Hola Jake. - dije sonriendo falsamente.
- ¿Qué hacéis aquí solitos? Eh pajaros. - dijo Jake.
- Celebrar que volvemos a estar bien. - dijo Chis.
- Oh ¿qué estabais en crisis de pareja? Me alegro de qué esteis bien. - dijo alegre.
- No pero si nosotros no.. - dijo Chris, pero al cuál corté.
- Nosotros también nos alegramos de estar bien. - dije.
- ¿Qué haces? - dijo Christian por lo bajini.
- Luego te lo explico. - le contesté. - Y ¿vosotros como vais? El amor no entiende de idiomas, así que aunque no os entendáis está bien eso de salir juntos ¿no? - dije.
- No estamos juntos. - dijo la alemana.
- Hostia pero si hablas mi idioma. - dije.
Chris empezó a reírse.
- Uy que tarde es, Chris venga vámonos que llegaré tarde a casa, un placer de nuevo chicos, ya nos veremos. - dije mientras agarraba a Chris del brazo.
Salimos de la heladería, y Chris aún seguía partiéndose.
- Chris ya pasó eh.
- 'Hostia pero si hablas mi idioma' - dijo a carcajada limpia. - Eres única en serio.
- Lo que no puede ser es que la tía esta venga de alemana y luego hable español, pues si que ha aprendido pronto sabes.
- Eso es que Jake le ha enseñado bien la lengua española. - dijo riendo.
- Eso quisiera esa. - dije riendo.
- Estás celosa eh.
- ¿Celosa yo? Para nada.
- Ah no, espera que tú estás conmigo. - reía.
- Es para que Jake vea que estoy ocupada, y así su chica no se preocupe por nada.
- Ya, o para ponerlo celoso.
- Vamos Chris, no soy tan imbécil, si yo me alegro de haya encontrado a otra.
- Cuando los veas de la mano y besándose no me dirás lo mismo.
- Verás como si. ¿Qué nos jugamos?
- Un polvo.
- ¿Tu eres tonto? - le miré mal.
- Era broma mujer, mmm si tengo razón yo, te quedas aquí, si tienes razón tú te vas a España.
- Trato hecho, ves preparando la caja de pañuelos para cuando me marche. - dije vacilándole.
- O tu para cuando me cuentes que te mueres por él.
- Sigue soñando. - dije. - Y anda más rápido que me voy a llegar tarde por tu culpa.
- Tranquila señorita.
Llegamos a casa.
- Hasta mañana melón. - dije abriendo la puerta.
- Oye Valeria.. ¿no vas a darme un besito de despedida? - dijo poniéndome morritos.
- Vete a la mierda capullo. - dije sacándole el dedo.
- Yo también te quiero. - se fue.
Entré a casa, saludé y subí directa a mi habitación, no me apetecía ni cenar, todo esto me quedaba muy grande, el fingir que todo me va genial, que no necesito a nadie de mi pasado, y mucho menos a Jake, me estoy engañando a mi misma, pero prefiero hacerme daño yo sola, a volver a hacerselo a Jake.
Me puse el pijama, y cogí el móvil para distraerme un poco, de repente me llegó un whatsapp que decía:
'Mira lo que acabo de encontrar'
Abrí la imagen, y era un marco enorme de fotos mías y de Jake.
Efectivamente, ese whatsapp era de Jake, no sabía que decirle, cómo reaccionar, ¿cómo había encontrado el marco, como había conseguido mi móvil nuevo?
Tras varios minutos decidí contestarle.
[Conversación, vía whatsapp]
- Hola Jake, madre mía, ¡cuánto tiempo sin ver ese marco! jajaja, ¿cómo has conseguido mi número?
- Me lo ha dado tu hermano, porque he encontrado este marco, y muchas cosas más contigo, y tenía curiosidad por una cosa :)
- ¿Qué cosa?
- ¿Por qué dejamos de ser amigos tú y yo?
- Porque me cambié de instituto y me alejé de todos, menos de Chris claro
- Es una pena, porque se nos ve tan felices en las fotos, y en los vídeos
- Ya lo sé, pero bueno la gente cambia..es tarde, creo que voy a irme a dormir que mañana madrugo.
- Antes de irte, quiero pedirte un favor
- Dime
- ¿Puedes ayudarme a recuperar mi memoria? Es decir, a contarme mi pasado, creo que me conoces mucho
- ¿No te gusta la vida que llevas ahora?
- Sí, bueno no sé, es que quiero saber más de mi, pero nadie quiere hablarme de ello.
- Me encantaría ayudarte, pero es mejor que no lo sepas, lo pasaste muy mal, por eso nadie te habla de ello.
- ¿Qué me pasó?
- Se me acaba la batería, buenas noches, descansa :)
[Última conexión, 23:43]
Como duele no poder decirle que estaba enamorado hasta las trancas de mí, como duele no poder decirle que dejaba todo y me iba al fin del mundo con él, como duele tener que callarse por no hacerle sufrir, maldito dicho de 'si amas algo, déjalo ir', ¿por qué? Nunca lograré entender eso, la cuestión es que nunca me sale bien nada, nunca, por más que lo intente, primero fue Michael, luego Jake, creo que estoy destinada a estar sola con 80 gatos, aunque conociéndome, los gatos se acabarían yendo de mi lado, como hacen todos.
Pasaron dos semanas, de aquella conversación con Jake, también pasaron dos semanas desde la última vez que lo había visto.
Quedé con Chris para ir a correr, la operación bikini anticipada estaba comenzando, pasó a recogerme a las siete y nos fuimos, pero yo no sé, si es que lo hacen aposta o como, pero Jake y su alemana estaba en el parque de picnick, fingí que me dolía el tobillo para pararnos casualmente en el banco de delante y así poder observar lo que hacían.
Jake no paraba de mirar a Andrea, podía ver como le brillaban los ojos al mirarla, como le temblaban las manos al coger algo de aquel magnífico picnick que tenía montado, o incluso a ver lo rojo que se ponía.
- Valeria, ¿tú pie va mejor o seguimos aquí viendo la cita de Jake y Andrea? - dijo Chris.
- ¿Qué?
- Vamos, que sé que me has traído aquí para ver que hacen.
- No, es que me duele el pie.
- ¿Cuántas veces tengo que decirte que a mí no me mientes?
- Vale, lo reconozco, es que no me gusta esa chica para él, tiene cara de ser mala, además viven lejos, no van a verse.
- Valeria, estás sacando las cosas de contexto, ni si quiera sabes si se gustan.
- Ella no lo sé, pero Jake te aseguro que sí, y mucho, podría decirte incluso que se está enamorando de ella.
- ¿Y tú como sabes eso?
- Porque he visto como la mira.
- ¿Y qué tiene que ver como la mira?
- Porque así es como me miraba a mi. -dije con la lágrima a punto de salirme.
- No sé porque haces esto. - dijo Chris.
- ¿Hacer el qué?
- Esto, Valeria, te estás haciendo daño tu misma.
- Me estoy haciendo daño, por no hacerselo a él, ¿crees que no me gustaría ir y apartar a la tiparraca esa de su lado?
- ¿Crees que estar aquí viendo como otra lo conquista es mejor? ¿Por qué no haces nada para evitarlo?
- Porque yo quiero su felicidad, y si la encuentra con otra persona, aunque me joda, tengo aceptarlo, yo tuve mis oportunidades y las desaproveché todas, es culpa mía.
- Todo el mundo comete errores.
- Vámonos por favor.
Chris me acompañó a casa, al llegar me di un baño para relajarme, durante el baño, un mensaje llegó a mi móvil, me extrañé, ya que no esperaba mensajes de nadie, y menos a estas horas, cogí el móvil, lo desbloqueé y allí estaba este maldito nombre de nuevo 'Jake'.
'Qué querrá otra vez este chaval' pensé.
Abrí el mensaje.
'Te quiero pequeña'.
El móvil se me calló de las manos tan rápido como leí el mensaje, ¿estaba soñando, esto era una broma?
Si esto era un sueño, no quiero despertarme nunca.
